sábado, 10 de febrero de 2018

EL PENSAMIENTO





El pensamiento se define como la operación intelectual de carácter individual que se produce a partir de procesos de la razón. Los pensamientos son productos que elabora la mente voluntariamente, a partir de una orden racional, o involuntariamente a través de un estímulo externo.

El pensamiento de las personas tiene una serie de características. Es acumulativo y se desarrolla a lo largo de toda la vida, ya que funciona a partir de estrategias que se van añadiendo entre ellas. Estas estrategias se crean para resolver problemas, pero, muchas veces, también para crearlos.

El pensamiento influye y modula el lenguaje, y también va configurándolo. El pensamiento se puede presentar de distintos modos, según el tipo de operación mental que requiera la actividad:

• El pensamiento inductivo es el que se apoya en una particularidad, y a partir de allí la extrapola y la transforma en una generalidad. Parte de la base de que si algo es cierto en algunas ocasiones, lo será en otras similares.

• El pensamiento deductivo es el que parte de una generalidad y la aplica a cada particularidad. Si se conoce un todo, se cree, las partes obedecerán a las leyes generales del todo.

• El pensamiento interrogativo es el que se utiliza cuando uno tiene una inquietud; incluye la forma en la que será presentada la pregunta para obtener efectivamente la respuesta deseada. Es el pensamiento basado en la astucia.

• El pensamiento creativo es la fuente de toda realización artística: basado en la inspiración.

• El pensamiento analítico es el que analiza y prioriza las ideas.

• El pensamiento crítico es capaz de evaluar otros pensamientos. Analiza la forma en la que se desenvuelve el conocimiento, asegurando una mayor libertad a la hora del ejercicio del pensamiento.

• El pensamiento instintivo o instinto (con el que actúan los animales, pero también las personas en algunos casos). Los animales realizan la acción de «pensar» de una forma práctica y basada en la experiencia.

La diferencia con las personas radica en que no poseen la capacidad de encontrar las causas ni las consecuencias de sus comportamientos.

El pensamiento es aquello que se trae a la realidad por medio de la actividad intelectual. Por eso, puede decirse que los pensamientos son productos elaborados por la mente, que aparecen por procesos racionales del intelecto o bien por abstracciones de la imaginación y pueden ser de diferente signo. Son positivos cuando nos infunden felicidad y alegría, y negativos cuando nos sumen en la tristeza. Ambos tipos dependen de la estructura de pensamiento, aprendida, heredada o influenciada por el entorno.

Mediante el pensamiento, pensamos, no damos carta de naturaleza a su consecuencia; aunque pudiera quedarse en una hipótesis de imaginación y nada más, la mayoría de las veces evoluciona hacia el segundo peldaño de la escalera, los sentimientos, algo que precisa de mayor elaboración.

Libro.- “Genética de la Emoción el origen de la Enfermedad”

Autor.- Antonio Alcalá Malavé

No hay comentarios.:

Publicar un comentario